Fábulas en Preescolar: La Liebre y la Tortuga

02/01/2023

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Introducir a los niños en el mundo de la lectura y la comprensión de valores desde una edad temprana es fundamental para su desarrollo. Las historias cortas y significativas, como las fábulas, ofrecen una puerta de entrada perfecta a este universo. No solo entretienen, sino que también transmiten enseñanzas esenciales de una manera simple y memorable, preparando el terreno para futuros aprendizajes y una sólida base moral.

¿Cómo se puede trabajar la fábula en preescolar?
PROPUESTAS PARA DESPUÉS DE LA LECTURA O NARRACIÓN:1Renarrar la historia en forma grupal.2Ordenar una secuencia temporal con imágenes de la fábula.3Elegir los dibujos adecuados para cada parte de la historia.4Comparar la versión narrada con la película. ...5Representar la fábula con títeres.6Dramatizar la fábula.

Las fábulas, con sus personajes animales que actúan como humanos y sus claras lecciones, se convierten en aliadas poderosas para educadores y padres. Permiten abordar temas complejos como la paciencia, la perseverancia o la humildad de una forma accesible y comprensible para las mentes jóvenes. Exploraremos cómo una de las fábulas más icónicas, "La Liebre y la Tortuga", puede ser utilizada de manera efectiva en el entorno preescolar para enriquecer la experiencia educativa.

Índice de Contenido

¿Qué es una Fábula y por Qué Usarlas en Preescolar?

Para empezar, es útil entender qué es una fábula. De manera sencilla, las fábulas son relatos cortos y ficticios, es decir, que no son reales. Una característica distintiva y fundamental es que suelen estar protagonizadas por animales que se comportan, hablan y piensan como personas. El objetivo principal de estas historias es transmitir una enseñanza o lección de vida al lector, a la que llamamos moraleja. Esta moraleja a menudo aparece explícitamente al final del relato, aunque a veces los niños pueden inferirla a través de la discusión y reflexión.

Utilizar fábulas en preescolar es una estrategia pedagógica muy valiosa por múltiples razones. Primero, capturan la atención de los niños gracias a sus protagonistas animales y tramas sencillas. Segundo, son una excelente herramienta para crear amor por la lectura desde la infancia. Al escuchar historias interesantes y con un propósito claro, los niños asocian la lectura con algo positivo y divertido. Tercero, ayudan a aumentar el vocabulario de los pequeños al exponerlos a nuevas palabras y expresiones en contextos significativos. Y, quizás lo más importante, las fábulas son vehículos perfectos para enseñar valores y promover el pensamiento crítico. A través de las acciones de los personajes y la resolución de conflictos, los niños pueden reflexionar sobre lo que está bien y lo que está mal, y cómo aplicar esas lecciones en su propia vida.

"La Liebre y la Tortuga": Un Clásico Inolvidable

La fábula de Esopo, “La liebre y la tortuga”, es, sin duda, una de las más conocidas y queridas universalmente. Su sencillez y la fuerza de su mensaje la hacen ideal para trabajar con niños pequeños.

La historia narra la disputa entre una liebre, conocida por su velocidad y arrogancia, y una tortuga, famosa por su lentitud pero también por su constancia. La liebre se jactaba constantemente de ser el animal más rápido del bosque y se burlaba de la lentitud de la tortuga. Para resolver su discusión, deciden competir en una carrera.

Al dar la señal de inicio, la liebre sale disparada a toda velocidad, dejando a la tortuga muy atrás en cuestión de segundos. Corre enérgicamente durante un buen tramo, sintiéndose segura de su victoria. Al mirar hacia atrás y no ver a la tortuga por ningún lado, su exceso de sobreconfianza la lleva a tomar una decisión que cambiará el curso de la carrera: decide que tiene tiempo de sobra para descansar. Se sienta a la sombra de un árbol frondoso y, arrullada por la brisa y la seguridad de su ventaja, se queda profundamente dormida.

Mientras tanto, la tortuga, con su ritmo lento pero firme, no se detiene. Pasito a pasito, tan rápido como le es posible, sigue avanzando por el camino hacia la meta. No se distrae, no se desanima por la aparente velocidad de la liebre; simplemente se enfoca en su objetivo y mantiene su constancia.

Cuando la liebre finalmente despierta de su siesta, se da cuenta de que ha perdido mucho tiempo. Corre con todas sus fuerzas para recuperar el terreno perdido, pero es demasiado tarde. Desde lejos, ve a la tortuga cruzando la línea de meta, habiendo ganado la carrera gracias a su esfuerzo ininterrumpido.

La Profunda Moraleja

Esta fábula encierra varias lecciones valiosas para los niños. La moraleja principal que se desprende de la historia es que, aunque a veces parezcamos lentos o menos dotados que otros, con paciencia, constancia y seguridad en nosotros mismos, podemos alcanzar el éxito. La victoria de la tortuga demuestra que la perseverancia y no rendirse son cualidades más importantes que la velocidad o el talento natural por sí solos.

Además de la lección sobre la perseverancia, la fábula también nos enseña sobre los peligros del exceso de confianza y la arrogancia. La liebre pierde no por falta de habilidad, sino por subestimar a su oponente y confiar demasiado en sus propias capacidades sin poner el esfuerzo necesario. También nos muestra que no debemos burlarnos jamás de los demás, ya que todos tenemos nuestras propias fortalezas y debilidades, y el respeto es fundamental.

Actividades Enganchantes para Después de Leer

Leer o narrar la fábula es solo el comienzo. Para maximizar su impacto educativo en preescolar, es crucial realizar actividades posteriores que permitan a los niños procesar la historia, comprender la moraleja y desarrollar diversas habilidades. Aquí te presentamos algunas propuestas:

  • Renarrar la historia en forma grupal: Sentados en círculo, invita a los niños a contar la fábula con sus propias palabras, turnándose para añadir partes de la historia. Esto fomenta la comprensión, la memoria secuencial y la expresión oral.
  • Ordenar una secuencia temporal con imágenes de la fábula: Prepara o utiliza un conjunto de imágenes que representen los momentos clave de la historia (la discusión, la carrera, la liebre durmiendo, la tortuga avanzando, la tortuga llegando a la meta, la liebre lamentándose). Pide a los niños que las ordenen cronológicamente. Esta actividad refuerza la comprensión de la estructura narrativa y el concepto de tiempo.
  • Elegir los dibujos adecuados para cada parte de la historia: Muestra varias imágenes, algunas relacionadas con la fábula y otras no. Pide a los niños que identifiquen solo aquellas que pertenecen a la historia de la Liebre y la Tortuga y que expliquen por qué.
  • Comparar versiones: Si has utilizado un video o una versión animada, compara la versión narrada por el adulto con la versión visual. Pide a los niños que identifiquen semejanzas y diferencias. Esto promueve la observación y el análisis comparativo.
  • Representar la fábula con títeres: Utiliza títeres sencillos de una liebre y una tortuga (pueden ser de dedo, de bolsa, o hechos por ellos mismos). Anima a los niños a representar la historia en pequeños grupos. Esto estimula la creatividad, el juego simbólico y la expresión corporal y verbal.
  • Dramatizar la fábula: Asigna roles (Liebre, Tortuga, otros animales si se desea, narrador) y permite que los niños actúen la historia. La dramatización ayuda a los niños a ponerse en el lugar de los personajes, a comprender sus emociones y motivaciones, y a practicar el diálogo.
  • Inventar otro final: Después de comprender la historia original y su moraleja, invita a los niños a imaginar y proponer otros posibles finales. ¿Qué hubiera pasado si la liebre no se dormía? ¿Y si la tortuga se cansaba? Esto potencia la creatividad y el pensamiento divergente.

Propuesta Detallada: Trabajando la Fábula con Uruguay Educa

Existe una propuesta muy interesante basada en un video de la fábula “La Liebre y la Tortuga” que permite trabajar de forma más profunda la superestructura narrativa, la descripción y el diálogo entre los personajes principales. Esta propuesta es un excelente ejemplo de cómo desglosar una historia para analizar sus componentes con niños en edad preescolar.

Se inicia presentando a los niños una imagen que muestra una escena clave de la fábula con los personajes principales. A partir de esta imagen, se les invita a realizar una “lectura de la imagen” y a predecir lo que creen que sucederá. Se plantean preguntas como: “Si fuera un cuento, ¿cuál creen que sería la historia?”, “¿Cuáles serán sus personajes?”, “¿Pertenecen al mundo real o ficticio? ¿Qué pistas encuentran que les ayudan a descubrirlo?”, “¿En qué lugar se desarrollará?”. Este paso activa los conocimientos previos de los niños y fomenta la formulación de hipótesis.

Luego, se presenta el video de la fábula. Tras verlo, se realiza un comentario general para asegurar la comprensión básica de la trama. La propuesta se centra entonces en la “Problematización: Reconocer importancia de los personajes en el cuento”.

Se guía a los niños para que identifiquen a los personajes principales y reconozcan la presencia de otros personajes (los animales espectadores). Se reflexiona sobre el papel que desempeña cada uno en la historia: ¿Qué hace la liebre? ¿Qué hace la tortuga? ¿Son importantes los otros animales? Esto ayuda a diferenciar personajes primarios de secundarios y a entender cómo las acciones de cada uno influyen en el desarrollo de la trama.

Además del análisis de personajes, se trabaja la ubicación espacial y temporal. Se pide a los niños que identifiquen el lugar donde se desarrolla la carrera. Se les guía para que reconozcan elementos o pistas aportadas por el video que permiten ubicar la historia en un tiempo determinado, como el color del cielo, la posible estación del año (por el paisaje, el color del pasto), la vestimenta de los personajes (si aplica a la versión del video). Esto desarrolla la capacidad de observación y el pensamiento inferencial.

Como actividad de cierre, se sugiere la creación de un supuesto diálogo entre la Liebre y la Tortuga después de finalizada la carrera. Se les pide a los niños que imaginen qué se dirían, recordando las características de personalidad de cada personaje (la liebre quizás un poco avergonzada, la tortuga amable pero firme en su logro). Esta actividad fomenta la empatía, la creatividad y la práctica del diálogo, reforzando la comprensión de las motivaciones y sentimientos de los personajes.

Más Allá de la Carrera: Secuelas y Versiones Alternativas

La riqueza de “La Liebre y la Tortuga” ha inspirado numerosas variaciones y continuaciones que también pueden ser exploradas para ofrecer nuevas perspectivas y lecciones.

Algunas “adiciones” a la historia original plantean qué pudo haber sucedido después de la primera carrera. Una versión propone que la liebre, tras reflexionar sobre su derrota y reconocer su sobreconfianza como causa, desafía a la tortuga a una segunda carrera. En esta ocasión, la liebre corre rápido pero de manera constante, sin detenerse, y gana. La moraleja aquí se amplía: el éxito a menudo requiere una combinación de talento natural y esfuerzo constante.

Otra interesante secuela imagina que en un nuevo desafío, la tortuga, consciente de sus fortalezas, acepta la carrera con la condición de elegir el camino. El camino elegido incluye un río que la liebre no puede cruzar, mientras que la tortuga nada con facilidad y gana nuevamente. Esta versión enseña la importancia de conocer nuestras propias fortalezas y debilidades, y ser estratégicos para jugar en nuestro propio terreno favorable.

Existen también “historias alternativas” que adaptan el concepto a escenarios diferentes. Una de ellas, “Una Carrera Hacia la Rueda de la Fortuna”, narra cómo la liebre se burla de la tortuga en el camino hacia una rueda de la fortuna, tomando un camino lleno de gente, mientras la tortuga usa un atajo por el bosque que incluye cruzar un estanque nadando, llegando mucho antes. La lección: reconocer nuestras fortalezas individuales y no compararnos constantemente con los demás.

Otra versión alternativa, “Una Carrera Hacia el Otro Pueblo”, presenta a la liebre y la tortuga como amigos que deben tomar un barco temprano para visitar otro pueblo. La liebre, confiada en su velocidad, se duerme, mientras la tortuga se levanta temprano a pesar de la lluvia y toma el barco. La liebre se pierde la excursión. Esta historia refuerza que la sobreconfianza es perjudicial y que la planificación y el esfuerzo son cruciales, y reitera que nunca hay que burlarse de aquellos que parecen menos talentosos, pues el esfuerzo y la planificación pueden superarlos.

Tabla Comparativa: Liebre vs. Tortuga

Para ayudar a los niños a visualizar y comprender las diferencias clave entre los personajes y las lecciones que encarnan, una tabla comparativa puede ser muy útil:

CaracterísticaLa LiebreLa Tortuga
VelocidadMuy rápidaMuy lenta
Actitud InicialArrogante, jactanciosa, burlonaTranquila, paciente, decidida
Enfoque en la metaSe distrae, subestima al oponente, descansaConstante, persistente, enfocada
ConfianzaExceso de confianza (llevando a la negligencia)Segura de sí misma (en su capacidad de avanzar)
Resultado (en la 1ª carrera)Pierde la carreraGana la carrera
Lección que encarna (en la 1ª carrera)Peligro de la sobreconfianza y la subestimaciónValor de la constancia y la perseverancia

Lecciones Clave que los Niños Pueden Aprender

En resumen, la fábula de “La Liebre y la Tortuga” y sus variaciones ofrecen múltiples lecciones adaptadas a la comprensión infantil:

  • Ser paciente y tranquilo: Observar a la tortuga, que nunca se irrita por las burlas de la liebre, enseña la importancia de mantener la calma y la paz mental.
  • Evitar la sobreconfianza: El error fatal de la liebre ilustra claramente cómo creer que la victoria está asegurada sin esfuerzo puede llevar a la derrota.
  • Mantener el enfoque en las metas: La tortuga no se distrae, simplemente sigue adelante hacia la línea de meta. Esto enseña a los niños la importancia de concentrarse en sus objetivos.
  • El valor del trabajo duro y la constancia: La tortuga demuestra que el esfuerzo continuo y la determinación pueden superar la ventaja del talento natural si este no se acompaña de disciplina.
  • Conocer y usar las propias fortalezas: Algunas versiones alternativas resaltan la inteligencia de la tortuga para elegir un camino donde su habilidad para nadar la beneficia, enseñando a aprovechar lo que uno hace bien.
  • No burlarse de los demás: La actitud inicial de la liebre es un ejemplo de lo que no se debe hacer. La historia promueve el respeto por los demás, independientemente de sus habilidades aparentes.

Preguntas Frecuentes sobre la Fábula

Es común que surjan preguntas al explorar esta fábula con los niños. Aquí respondemos algunas de las más frecuentes:

¿Quién escribió la historia de “La Liebre y la Tortuga”?

La fábula original de “La Liebre y la Tortuga” se atribuye a Esopo, un famoso cuentacuentos griego que se cree vivió alrededor del 620 al 564 a.C. Sus fábulas han sido transmitidas a lo largo de los siglos debido a su sabiduría y simplicidad.

¿Qué significa la frase “lento pero seguro gana la carrera”?

Esta frase popular encapsula la moraleja principal de la fábula. Significa que la consistencia, la determinación y la persistencia en tus esfuerzos pueden llevarte al éxito, incluso si tu progreso parece lento en comparación con otros. Lo importante es no detenerse y seguir avanzando hacia tu meta.

¿Por qué la Liebre perdió la carrera contra la Tortuga?

La Liebre perdió la carrera principalmente debido a su sobreconfianza. Estaba tan segura de que ganaría fácilmente que subestimó a la Tortuga y decidió tomar una siesta en medio de la carrera. Su falta de esfuerzo continuo y su distracción le costaron la victoria frente a la constancia de la Tortuga.

Conclusión

La fábula de “La Liebre y la Tortuga” es mucho más que un simple cuento infantil. Es una herramienta pedagógica rica que, utilizada de manera interactiva y reflexiva, puede sembrar importantes semillas de valores como la perseverancia, la humildad, la paciencia y el enfoque en las metas. Al incorporar actividades variadas y explorar las diferentes capas de la historia, los educadores y padres pueden ayudar a los niños de preescolar a desarrollar no solo el amor por la lectura, sino también habilidades de pensamiento crítico y una comprensión más profunda del mundo y de sí mismos. Es una historia que demuestra que, con esfuerzo y constancia, se pueden alcanzar grandes logros, sin importar las dificultades o la velocidad inicial.

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